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ODS 3: LA SOLIDARIDAD ENTRE GENERACIONES NOS CONVIERTE EN HUMANOS




En el Día Europeo de la Solidaridad y Cooperación entre Generaciones, 29 de abril, compartimos el reportaje que publica la Revista ALMA de la Fundación La Caixa, https://miradasconalma.org/, en su sección Historia: Personas Mayores, sobre la importancia de fortalecer las relaciones con nuestros mayores, para construir, juntos, una sociedad en la que todos tengamos cabida.



LA SOLIDARIDAD ENTRE GENERACIONES NOS CONVIERTE EN HUMANOS


Las personas somos seres interdependientes. Necesitamos del apoyo de los demás para vivir una vida plena, sobre todo en momentos tan duros como los actuales. Por eso hoy, Día Europeo de la Solidaridad y Cooperación entre Generaciones, queremos destacar la importancia de fortalecer las relaciones con nuestros mayores, para construir, juntos, una sociedad en la que todos tengamos cabida. Para lograrlo, la Fundación ”la Caixa” apoya el reto número tres de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, relacionado con la promoción de la salud y el bienestar, impulsando proyectos como el Programa para Personas Mayores. Porque el mundo necesita a las personas. Y las personas necesitan al mundo.


Según la OMS, España es el tercer país del mundo con mayor esperanza de vida. Por eso, la promoción de hábitos de vida que promuevan un envejecimiento activo y saludable es una prioridad. Así, celebrar el Día Europeo de la Solidaridad y Cooperación entre Generaciones, sobre todo en un contexto de pandemia, nos sirve para reflexionar sobre los retos que esta plantea en cuanto a la salud y bienestar de las personas mayores, y los antídotos para hacerles frente. Y uno de los más poderosos es la solidaridad.


Hablamos de esta virtud con tres personas que conocen bien su valor y el increíble impacto que tiene en la salud y el bienestar de las personas: son Ángel Franco, director de comunicación de Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL); Javier Yanguas, director científico del Programa de Personas Mayores de la Fundación ”la Caixa” y Mireya García-Durán, técnica de Incorpora y responsable de este programa de inserción laboral en la Fundació Raval Solidari y en Acció Social Montalegre.


Para Ángel, la solidaridad intergeneracional forma parte de nuestro ADN, aunque reconoce que ya no es como antes. Sin embargo, dice que la pandemia nos ha servido para abrir los ojos. “Muchas personas mayores han fallecido a causa de la COVID-19 en la mayor de las soledades. Creo que eso nos está llevando a reconsiderar la relación que tenemos con ellas y a pensar en cómo podemos estar más unidos y ser más solidarios entre nosotros”. Algo que comparte Javier, del programa para Personas Mayores, quien cree que ese pacto no escrito, en que se espera que nuestros hijos cuiden de nosotros al envejecer, estaba desapareciendo. “Nos hemos ido separando afectivamente. Ahora tenemos que volver a encontrar esos elementos que nos unen para lograr un futuro común y compartido”.


Cada vez vivimos más aislados, y no solo las personas mayores. Javier explica que el 20 % de los jóvenes de entre 20 y 39 años está en riesgo de aislamiento social a causa de la quiebra de la red de amigos, según un estudio que hemos realizado en nueve ciudades españolas. “La pandemia y el confinamiento han subrayado que el aislamiento social y la soledad traen muchas consecuencias negativas para la salud. Necesitamos recuperar el tipo de relaciones que teníamos antaño, de mayor cercanía emocional y confianza, esas relaciones que nos puedan ayudar en caso de necesidad. Ha quedado claro que somos interdependientes, vulnerables y que tenemos que asumir esa vulnerabilidad”.


En este sentido,las redes de apoyo comunitarias se han demostrado fundamentales para superar las crisis. “Y no las habíamos trabajado, creo que hasta las habíamos olvidado”, dice Javier. Por su parte, Mireya García-Durán, propone mejorar la empatía y escuchar mejor: “Creo que nuestros mayores tienen mucho que aportarnos, y también los más pequeños. Escucharnos unos a otros hará que los lazos entre generaciones sean más fuertes”. De hecho, para ella, la solidaridad es la que nos convierte en homo sapiens, en seres humanos. “Si no somos capaces de pensar en los demás, nos convertimos en máquinas.”


Tanto es así, que los tres están de acuerdo en afirmar que la solidaridad tiene un impacto positivo en la salud física y emocional de las personas. Ellos lo ven en su día a día. La FESBAL, por ejemplo, puede continuar distribuyendo alimentos a los que lo necesitan gracias al apoyo de ciudadanos y empresas y a un ejército de jóvenes que se ha ofrecido a realizar la labor de los hasta entonces voluntarios, la mayoría personas mayores jubiladas que ahora tienen que quedarse en casa. Y Ángel confía en que toda esa solidaridad se sostenga en el tiempo, una vez concluya el periodo del confinamiento.


Javier también cree que la crisis no ha hecho más que recordarnos ese doble reto de mejorar el acompañamiento de las personas mayores y crear redes de voluntariado estables para contribuir al bien común. Por eso el Programa para Personas Mayores ha reforzado el proyecto Siempre Acompañados: a raíz de la pandemia, han surgido necesidades relacionadas con aspectos más emocionales (angustias y miedos) en personas que ya estaban en situaciones de soledad forzada y cuyos problemas ahora se han acrecentado. “Por otro lado, también hemos empezado a recoger historias de fortaleza de personas mayores a lo largo de la epidemia, porque pensamos que, en general, la han soportado con una gran entereza y queremos presentar una visión de ellos centrada en sus capacidades y su resistencia. De lo contrario, se promueve una idea que debería estar ya superada, que sugiere que la edad es lo fundamental y que no nos deja ver las diferencias ni la heterogeneidad del colectivo”, destaca Javier.


Según él, es importante que entendamos que “somos un ejército de personas que, si nos comprometiéramos en términos de voluntariado, seríamos un arma muy poderosa de transformación social, que no solo ayuda al que tiene la necesidad sino al que ofrece su tiempo. Ahora es el momento ideal para construir una sociedad en la que aprendamos a estar todos juntos en un mismo barco y a luchar los unos por los otros”.

Extracto: En el Día Europeo de la Solidaridad y Cooperación entre Generaciones, destacamos la importancia de fortalecer las relaciones con nuestros mayores, para construir, juntos, una sociedad en la que todos tengamos cabida.

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